La poda de verano: una práctica que mejora las características organolépticas de la manzana.

En pleno mes de julio, nos encontramos inmersos en la poda de verano de nuestros manzanos. Una práctica que llevan a cabo nuestros cincuenta trabajadores más expertos y que permite aportar luz a la manzana, transmitiendo la máxima energía del árbol a los frutos y consiguiendo una fruta con mejores características de color, aroma y sabor.

 Las ramas podadas se acumulan alrededor del árbol transformándose en materia orgánica e incorporándose al suelo como un abono natural, lo que hace que el aporte de abonos químicos sea mucho menor.